Levántate con tiempo

La herramienta de hoy, es más un cambio de costumbre que una herramienta... Se trata de levantarte con tiempo... parece una afirmación muy evidente, pero muchas veces no tenemos en cuenta la importancia de este hecho. 

 

La energía con la que nos levantamos cada mañana es muy importante, es el estado de ánimo, el nivel de vibración con el que vamos a afrontar todo nuestro día y es muy importante salir de casa con ganas y motivados para vivir plenamente y con conciencia todas las situaciones que viviremos durante nuestra jornada.

 

Si nos levantamos con el tiempo justo para prepararnos por la mañana, estamos empezando el día con demasiada velocidad y nerviosismo, si surge algún  imprevisto, perderemos la calma, y saldremos de casa con un estado de ánimo y vibración que no nos van a favorecer durante el día... eso si tenemos suerte, porque si nos dejamos llevar por las emociones seguramente saldremos de casa enfadados, y de mala gana.

 

Aprendí hace tiempo que las personas más efectivas y productivas suelen levantarse pronto para tener ese tiempo personal para hacer lo que les gusta. Lo ideal sería que te reservarás media hora o 45 minutos cada mañana para ti... para hacer un pequeño croquis de todo lo que vas a hacer este día... visualizar las situaciones que vas a vivir desarrollándose fácilmente... Por ejemplo, esa mañana tienes una reunión con un cliente, o tienes que organizar el almacén de tu tienda o tienes que ir a hacer unas gestiones al banco.... visualiza ese momento desarrollándose como tu deseas... observa como todo va bien y sale como tu esperas. 

 

Otro buen ejercicio para empezar el día con buena vibración es agradecer, normalmente vivimos pensando que será la vida es para siempre... no somos conscientes de su fragilidad y de que cada día podría ser el último... agradece cada mañana las oportunidades que te brinda el nuevo día, agradece poder compartir un día más con las personas que quieres, poder sentir el calor del sol en la piel, poder oler una flor, poder disfrutar de una buena comida.... este ejercicio tan y tan sencillo te ayuda a ser consciente de que vivir es un regalo y muchas veces no lo apreciamos lo suficiente.

 

Algo también importante es nutrirnos bien por la mañana, es decir, tomar un buen desayuno que nos llene de energía... un café y dos galletas no nos sirven para aguantar hasta el mediodía. Un desayuno nutritivo debe contener carbohidratos, grasas y proteínas. Los carbohidratos vendrían a ser los cereales y el pan, las grasas las obtendremos de los frutos secos, el aguacate, los aceites. La proteínas pueden ser de origen animal o vegetal, huevos, carne, pescado, leguminosas. Y estaría muy bien incluir alguna pieza de fruta, ya sea en zumo o en pieza.

 

Por ejemplo, un desayuno completo podría ser un bol de cereales con yogur, frutos secos y un zumo licuado de frutas. Otro, una tostada de pan integral con aceite de oliva, tomate a rodajas y aguacate con un cafe con leche vegetal o un zumo de frutas. Otro, bocadillo de atún con un batido de frutas y frutos secos. como ves tienes muchas posibilidades, no tienes porque aburrirte desayunando cada día lo mismo, las combinaciones son infinitas.

 

Desayunar bien no es difícil es cuestión de hacerlo con tiempo.... si nos reservamos 10 minutos para desayunar es evidente que no podremos desayunar correctamente, deberíamos tener al menos 20-30 minutos para desayunar tranquilamente y sentados....nada de desayunar de pie o corriendo por la casa mientras te preparas para salir.

 

Por la mañana puedes hacer muchas cosas, todo depende del tiempo que te des.... puedes leer algún libro durante 15-20 minutos, salir a correr 30 minutos, hacer alguna serie de ejercicios, tomar una buena ducha acabando con agua fría para vigorizarnos, hacer un poco de yoga, meditar, escribir en tu diario....

 

Por ejemplo, una buena rutina matinal podría ser:

 

Si tengo que salir de casa a las 8:30 me levantaré a las 6:30.

  • Primero, me asearé un poco, me lavaré la cara con agua fría para desperezarme.
  • Segundo, dedicaré 20 minutos a hacer una rutina de ejercicios suave, estiramientos o yoga, o si el día acompaña saldré a dar un paseo, al acabar me daré una ducha rápida y vigorizante, acabando con agua fría.
  • Tercero, prepararé mi desayuno y desayunaré tranquilamente mientras leo o escribo en mi diario, hago el ejercicio de dar las gracias, o sencillamente estaré en el momento presente intentando saborear al máximo el desayuno, y percibiendo mi entorno a través de los sentidos.
  • Cuarto, acabaré de prepararme y listo... salgo de casa con la vibra a tope, lista para darlo todo.

Fácil.... ¿no? Te animo a que te hagas estas preguntas ¿ Que es lo primero que pienso al abrir los ojos por la mañana? ¿Como es mi rutina matinal? ¿Como sería mi mañana ideal? Tomate un tiempo para hacerte estas preguntas, coge un boli y un papel, y organiza tu nueva rutina matinal, ten en cuenta todos los detalles, organiza los horarios, y pon en practica tu rutina... durante una semana. Pasada esa semana, analiza como te ido y si deberías cambiar alguna cosa. Y sigue disfrutando de tus nuevas mañanas.

 

Al principio, seguramente te costará, pero es normal... los humanos somos animales de hábitos y costumbres. A veces hacer cambios nos genera algunas resistencias, porque se sale de los automatismos mentales, se sale de nuestras rutinas, debes ser pacientes contigo mismo.... reconoce que esas resistencias están ahí, no las ignores, no las apartes pero mantente firme en tu decisión, solo por una razón: porque tu has decidido que tus mañanas a partir de ahora van a ser así.

 

Animo, empezar el día con tiempo y disfrutar de la mañana es posible.... solo es cuestión de organizarse.

Escribir comentario

Comentarios: 0